Dossier: Especial Penedès

No es de extrañar que vestigios arqueológicos hayan revelado la importancia de la vid y el vino desde tiempos íberos. Y es que las condiciones climáticas y la proximidad a puertos de gran importancia estratégica para el comercio, han hecho del Penedès -(pretérito y actual)- un enclave de suma riqueza cultural con una vastísima historia vitivinícola.

Si bien el poeta romano Anneo Floro escribió sobre los tintos de la zona que “los vinos producidos en las colinas pueden compararse a los más ricos de Italia.”, el Penedès no asume un papel protagonista en la elaboración de vinos de alta calidad hasta mediados del s. XX.

Sin profundizar demasiado en busca de razones por las que el Penedès, a pesar de su potencial, fue una región básicamente abastecedora durante largo tiempo, sí queremos incluir un par de ejemplos, muy someros y de distintas épocas, que nos ayudan a ilustrar el hecho que el Penedès siempre fue víctima de su tiempo y sus circunstancias:

  • Cuando en el s. XVII el gobierno francés cerró el mercado a los comerciantes holandeses, éstos desviaron su mirada a territorio español. De este modo, en el Penedès, variedades nobles fueron substituidas por ingentes producciones de variedades de uva blanca, utilizadas para la elaboración de brandi destinado a abastecer al nuevo amigo neerlandés. Y así fue durante más de dos siglos, filoxera de por medio.
  • La neutralidad de España en la I Guerra Mundial empujó a Cataluña a encontrar nuevos mercados con necesidad de ser abastecidos, de modo que este ciclo de grandes volúmenes continuó como modelo hegemónico de producción.

Así fue, hasta que, a caballo entre las décadas de los 50 y 60 del pasado siglo, el Penedès culmina la transición de su modelo productivo y se vuelca en la producción y embotellado de vinos tranquilos de calidad.

Seamplióy renovóel “jardín” ampelográfico del Penedès, experimentando con variedades foráneas como la cabernet sauvignon, convencidos de su natural aclimatación a los suelos que albergaban los viñedos.Del mismo modo, modernizaron las técnicas de elaboración y realizaron arriesgadas inversiones para recuperar la productividad y el prestigio de los antiguos pagos vitícolas.

De este impulso vital se producen grandes avances sin precedentes en el sector de la zona, como la utilización de tanques de acero inoxidable refrigerados para controlar las temperaturas de fermentación.

Como colofón a esta explosión renovadora, en abril de 1976 se aprueba la Denominación de Origen Penedès. Precedida por la fundación del Consejo Regulador, en 1960, que se encarga desde entonces de controlar la producción, el rendimiento de los viñedos y la cantidad de uva destinada a producir el vino calificado por la D.O.

Hoy, el Penedès continúa liderando la investigación en la viticultura y enología a nivel estatal. La existencia de infinidad de bodegas, grandes y pequeñas, que además son propietarias de viñedos propios -(algo no tan habitual como pueda parecer)- propician una sana competitividad que no hace más que estimular el crecimiento de un sector que convierte a sus vinos y cavas en iconos que definen la identidad de la comarca.

El entorno y el clima

En el Penedès caben muchos “penedeses”, si sepermite la expresión. Atrapado entre mar y montaña, en plena depresión pre litoral catalana, la región, que parece haber sido diseñada por la mano de un paisajista enófilo, se reparte el terreno de un modo escalonado: Desde el Penedès Marítimo, que acaricia la cordillera litoral, pasando por el Penedès Central que lo mismo mira a Montserrat que a la costa, hasta llegar al Penedès Superior, cuyos viñedos situados en cotas de hasta 700 m de altura parecen devolvernos la imagen de un espejo que adorna cualquier viñedo centro europeo.

Los suelos, en general, son de origen cuaternario, calcáreos y arcillosos. De color pardo y pobres en materia orgánica, ideales para el cultivo de la vid.

Las condiciones climatológicas de la comarca son típicamente mediterráneas, caracterizadas por su suavidad y calidez. No obstante, debido a su altitud y a su proximidad al litoral, el Penedès disfruta de diversos microclimas que favorecen la diversidad ampelográfica.

  • El Penedès Marítimo (o Bajo Penedès) concentra las zonas más calurosas y húmedas, alcanzado temperaturas superiores a los 30ºC. Las horas de sol anuales oscilan entre las 2400, 2500 y la pluviometría se estima en unos 400mm al año.
  • El Penedès Central también disfruta del clima mediterráneo, si bien es más seco y los inviernos son más fríos.
  • El Penedès Superior es mucho más frio que los anteriores. A pesar de su cercanía, el clima mediterráneo ya no es tan evidente, presentado características climatológicas de perfil continental.

Variedades y Vinos

La riqueza del arco ampelográfico del Penedès convierte a esta D.O. en una de las más versátiles y flexibles de Europa, en la que tienen cabida desde los blancos más jóvenes y aromáticos, hasta los tintos más rotundos y de tremendo potencial evolutivo.

Las variedades blancas del Penedès exhiben un abanico aromático envidiable en su juventud y presentan un excelente equilibrio acidez-alcohol. Las tradicionales son la xarel·lo, macabeo, parellada (la trilogía del cava), la malvasía de Sitges y en menor medida la garnacha blanca. La parellada, cultivada en el Penedès superior, es posiblemente la más fina. Aporta una muy buena acidez y permite la elaboración de blancos secos, frutales y de graduación moderada.

De entre las internacionales, destacan la chardonnay, la riesling, la moscatel de grano pequeño, la sauvignon blanc y la gewürztraminer. En su mayoría encuentran acomodo en el Penedés central y superior. A excepción de la moscatel que, mayoritariamente, se cultiva al abrigo de la costa, en el bajo Penedès.

Lasvariedades tintas ofrecen un sinfín de posibilidades. Las tradicionales garnacha tinta, monastrell, samsó, ull de llebre o la recia sumoll, conviven en perfecta armonía con variedades de origen foráneo pero de gran arraigo en la comarca, como las cabernet -sauvignon y franc-, syrah, merlot o la elegante pinot noir.

Las garnachas son muy comunes en los rosados del Penedès y debido a su buena graduación y cuerpo permiten un grato envejecimiento en roble en los tintos.

La eterna cabernet sauvignon brilla con luz propia, mostrando un carácter complejo, intenso y clásico. De gran personalidad, ofrece un enorme potencial evolutivo. No es de extrañar que muchas bodegas de la zona apuesten por ella para vestir a sus mono varietales más nobles.

Bodegas Torres en el Penedès

El Penedès alberga los viñedos que dan vida a 4 vinos de finca de la bodega, toda una declaración de respeto y fidelidad a nuestra tierra.

  • La Finca Mas la Plana, ubicada en el corazón del Penedès, concentra 29 hectáreas destinadas al cultivo de la variedad cabarnet sauvignon para la elaboración de uno de nuestros vinos más laureados, Mas la Plana, cuya primera añada -1970- batió a los más afamados chateaux franceses en la Gault Millau Olympiade Du Vin en 1979.
  • En el Penedès Superior, en el municipio de Santa María de Miralles se sitúa la Finca de Fransola, donde a 550m de altitud su cultivan 198 hectáreas de algunas de las variedades más características de nuestros viñedos. De ellas, 25 hectáreas de sauvignon blanc se destinan en exclusiva a la elaboración de Fransola. El suelo arcilloso y la ligera presencia de yeso en el perfil hacen de esta tierra un enclave perfecto para el cultivo de la vid.
  • Ubicada en la cordillera pre litoral, a 550m de altitud se erige la bella masia Mas Palau, situada en una antigua vía medieval, donde en un marco de 10 hectáreas cultivamos la variedad pinot noir con la que elaboramos nuestro Mas Borràs. Esta variedad, muy delicada, necesita un clima continental, una elevada altitud y un marcado contraste térmico entre el día y la noche.
  • La histórica finca de Santa Margarida d’Agulladolç, en el municipio de Mediona, acoge 4 hectáreas de viejas cepas sobre suelos de pizarra muy fina. Cabernet sauvignon, cabernet franc y merlot, encuentran acomodo a los pies de una ermita románica del s.XII, vistiendo de leyenda a Reserva Real, un vino único que solo se elabora en las mejores añadas.

El Penedès es nuestro hogar, donde se asientan nuestras raíces. Nos devuelve a nuestra esencia, a nuestro origen. Una suerte de acuerdo tácito con el que reconocemos todo lo que le debemos, todo lo que somos.

Referencias y enlaces de interés:

· “Vins i Caves de Catalunya”, Alfred Reixach. Ed. L’isard

· “Diccionario Salvat del Vino”, Mauricio Wiesenthal. Ed. Salvat

· www.torres.es

· www.dopenedes.es